ALQUILERES Y DESAHUCIOS
COMUNIDADES DE PROPIETARIOS
Comunidades convulsas que necesitan volver al camino de la sensatez, Comunidades defectuosamente constituidas y/o gestionadas que precisan de consejos prudentes pero apegados a la Ley, propietarios que sienten que se atropellan sus derechos, propietarios que viven lejos de sus pisos y no pueden acudir a las Juntas… encontrarán en nuestro Despacho soluciones ágiles, imaginativas y rigurosas.
Sabemos cómo contribuir a aliviar muchos de los problemas convivenciales que puedan padecer nuestros clientes. Anticipándonos al conflicto, con un asesoramiento prudente, cabal, y encaminado al restablecimiento de la armonía, cuando es posible. Y defendiendo con energía e inteligencia los intereses de nuestro cliente, cuando éstos han resultado atropellados.
Diálogo y firmeza, prudencia y audacia, son los términos que definen nuestras actuaciones en este campo. Nos avalan muchos años de experiencia, muchos clientes satisfechos, y muchos adversarios que han conocido nuestra manera de trabajar, y ahora son nuestros clientes.
No hemos encontrado un problema que no se pueda solucionar.
Y es que la convivencia entre vecinos no siempre es fácil. De hecho, los problemas suscitados en esta materia, vienen colapsando nuestros Juzgados desde siempre.
Precisamente para tratar de “poner orden”, en 1.960 entró en vigor una Ley muy original, muy nuestra, muy española, y que no tiene equivalencia en el derecho comparado: la Ley de Propiedad Horizontal. A todos nos suena. Es esa que viene regulando las Comunidades de Propietarios, y que nos ha acostumbrado a términos como el de Presidente, Administrador, Junta …
En 1.999 se acometió una reforma importante de dicha Ley, que trató de actualizar aspectos muy importantes que se habían quedado obsoletos hasta la reforma. Así, cuestiones como los ascensores, los equipos de telecomunicaciones, los conjuntos inmobiliarios formados por varios edificios… recibieron un tratamiento completo.
Sin embargo, pese a que tenemos una Ley muy interesante por su originalidad, y a que ha sido recientemente modernizada para adecuarse a los nuevos tiempos, las Comunidades de Propietarios siguen acaparando una gran parte de la carga de trabajo de nuestros Juzgados. Por eso, porque no bastan las leyes para acabar con los problemas, porque los problemas vienen aunque no los busquemos, un asesoramiento como el nuestro garantizará su prevención, su atenuación si llega, o su solución a favor de los intereses de nuestro cliente.
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